Un reciente informe de la Defensoría del Pueblo advierte sobre la creciente amenaza que enfrentan los habitantes de Maní, Monterrey, Orocué, Tauramena y Villanueva. El motivo: la lucha territorial entre grupos armados ilegales.

Esta situación ha llevado a la emisión de una Alerta Temprana, la número 016-2024, que busca prevenir posibles violaciones de Derechos Humanos en la región.

El documento detalla cómo las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC – Clan del Golfo), el ELN (frente José David Suárez) y facciones disidentes de las FARC (frente 28 y10 del Estado Mayor Central), se están disputando el control de estas zonas estratégicas.

Según la Defensoría la expansión de las AGC es particularmente preocupante. Este grupo ha logrado desplazar a estructuras paramilitares menores, consolidando su dominio mediante tácticas violentas.

Su estrategia no solo abarca áreas rurales, sino que también se extiende a zonas urbanas, aprovechando la pobreza y la exclusión social para ganar adeptos.

El informe señala que diversos sectores de la población están en riesgo. Entre ellos se encuentran líderes comunitarios, víctimas del conflicto, jóvenes, mujeres y servidores públicos.

Las amenazas van desde el desplazamiento forzado y el reclutamiento de menores hasta homicidios selectivos y ataques armados.

Frente a esta situación, la Defensoría ha emitido 28 recomendaciones dirigidas a entidades gubernamentales de todos los niveles. Se insta a las fuerzas de seguridad a intensificar sus operativos y labores de inteligencia.

Además, se solicitan medidas específicas como el establecimiento de puestos de control en zonas estratégicas y el refuerzo de la presencia militar en áreas rurales.

La implementación efectiva de estas recomendaciones será crucial para proteger a las comunidades afectadas y prevenir una escalada de violencia en la región.

Publicado en CN

El Ejército informó sobre el hallazgo y posterior destrucción de material explosivo, encontrado en zona rural del municipio de Puerto Rondón (Arauca).

Según la información oficial estos artefactos fueron instalados por el ELN. Igualmente precisó la institución oficial, que denunciará este hecho, porque considerarse como medios y métodos ilícitos de guerra, empleados por este grupo al margen de la ley.

El boletín señala que "tropas de la Fuerza de Tarea Quirón del Ejército Nacional, mediante operaciones de control territorial, hallan un área minada compuesta por un artefacto explosivo improvisado de alto poder, cuatro granadas, nueve medios de lanzamiento y diferente material de guerra”.

Para la autoridad militar los explosivos hallados tendrían como finalidad, ser utilizados en futuros actos terroristas. Así mismo agregó el escrito que el material fue destruido de manera controlada.

 

Publicado en CN

En una nueva jornada de definición de situación militar, 159 jóvenes de Yopal, víctimas del conflicto armado, presentaron sus documentos para iniciar el trámite de registro y verificación que les permitirá acceder a este documento.

En esta nueva jornada, realizada entre el 13 y el 14 de octubre, articulada por la Unidad para las Víctimas con el Distrito Militar N°9 y la Gobernación de Casanare, también se entregaron 45 libretas digitales y 7 físicas.

Las libretas están exentas de cobro y se entregan, en su mayoría, a jóvenes de esta población que la requieren para avanzar en su desarrollo educativo y profesional.

Uno de los favorecidos, Sebastián Camilo Becerra Torres, de 23 años, quien es víctima de desplazamiento forzado en situación de vulnerabilidad explicó la importancia de este beneficio: “Me dedico a oficios varios y se me había dificultado trabajar formalmente en algo más por no contar con este documento”.

La Unidad para las Víctimas recuerda a los interesados en acceder a la oferta de la libreta que deben realizar previamente las consultas sobre los tres requisitos establecidos en el artículo 140 de la ley 1448 de 2011, donde se contempla la exención de la prestación del servicio militar como una medida de satisfacción para hombres víctimas entre los 18 y 50 años.

 

  

Publicado en CN
Miércoles, 09 Diciembre 2020 23:34

Modos de producción y conflicto armado

Los diversos sectores y las dinámicas económicas del país han sido impactadas o han tenido relaciones con actores del conflicto armado colombiano. Para la Comisión para el Esclarecimiento de la Verdad, la Convivencia y la No Repetición es vital esclarecer y comprender esas relaciones.

Para estudiar la relación entre las dinámicas económicas con el conflicto armado colombiano, lo primero es entender qué son los modos de producción, así lo explica Andrés Fuerte, investigador de la Comisión de la Verdad: “son la forma en que se organizan las actividades económicas en un país o en un territorio. Son cosas tan concretas y esenciales como en qué trabajan las personas, de qué derivan su ingreso, su sustento, cuál es la relación que tenemos con el entorno, la naturaleza, el ambiente y los recursos naturales; y allí media también mucho la participación del Estado, es decir qué actividades o qué sectores económicos son favorecidos o incentivados por el Estado mediante las políticas públicas o la asignación de recursos del presupuesto, entre otros”.

Hasta el momento, de acuerdo con Fuerte, la Comisión de la Verdad ha guiado su investigación a partir de tres tipos de relación entre los modos de producción y el conflicto armado:

  1. Ha habido unos impactos muy directos de la violencia o del conflicto armado, mediante extorsiones, secuestros, atentados a la infraestructura productiva, el desplazamiento forzado; todas estas acciones afectan las actividades económicas de grandes empresarios, pequeños productores, campesinos, comerciantes, ganaderos, etc.
  2. Ha habido diferentes relaciones entre actores económicos, por un lado, y actores armados en el marco del conflicto. Esas relaciones pueden catalogarse como colaboración, alianzas, instigaciones de actores económicos hacia actores armados para perseguir un determinado fin y el financiamiento de estos actores económicos a grupos armados.
  3. Y una tercera relación se refiere a cómo en determinadas regiones del país, tras la intensificación de la violencia, se generaron desplazamientos masivos de población (8 millones de víctimas por desplazamiento); esas víctimas dejaron sus tierras, en ocasiones fueron forzadas a venderlas. Después de esto, se produjo una transformación drástica en los modos de producción, se pasó de economías campesinas de las comunidades rurales, étnicas, campesinas, afrodescendientes, a producciones de agroindustriales, minero energéticas y proyectos de infraestructura de puertos y represas, entre otras.

La tierra, el factor común

De acuerdo con Santiago Perry, miembro de la Misión Rural, “el tema de la tierra ha estado siempre asociado al conflicto, como componente central de éste; se refiere al proceso de apropiación de las tierras de los pequeños productores por parte de grandes propietarios, la lucha de esos pequeños productores por adquirir un pedazo de tierra que les permita vivir”.

“En la vieja violencia, la violencia liberal conservadora de mediados del siglo pasado, la lucha de la tierra y apropiación de las tierras tuvo un papel muy importante. Pero en los últimos años ha habido un cambio, la irrupción del narcotráfico y el fortalecimiento de todas las actividades ilícitas en las áreas rurales, la minería ilegal, etcétera. Ese cambio determinó que, si bien es cierto que la lucha por la propiedad de la tierra sigue teniendo un papel importante, el papel predominante lo tiene ahora la lucha por el control de los territorios, para cultivar la coca, para poner los laboratorios, para poder pasar y entrar los precursores químicos, entrar las armas, para poder sacar la coca, la amapola, la droga para la exportación”, explicó Perry.

El investigador agrega que a partir de esos procesos de control territorial nació el fenómeno del paramilitarismo. “Fue lo que generó los desplazamientos y muchos de los fenómenos de violencia que hemos vivido en los últimos 20 años en Colombia”.

Los acuerdos de paz sí funcionan

Carlos Rojas Arenas, presidente de la Cámara de Comercio de Casanare, cuenta que la economía ha sido bastante afectada por el conflicto armado. Sin embargo, a partir de las cifras del Producto Interno Bruto (PIB) y de la experiencia en el territorio, “se puede ver que después de que se han presentado procesos de paz hay mejoras económicas. Primero entre el 2003 y el 2006 con toda la desmovilización de grupos paramilitares, tiempo después se empezó a motivarse nuevamente el retorno de muchas personas a sus territorios, el crecimiento en el sector agrícola y pecuario, e inclusive la ampliación de la inversión nacional”.

En cuanto al proceso de paz con la guerrilla de las FARC, que se firmó en 2016, “al pasar un tiempo se ha empezado a generar confianza, a darse inversiones también muy importantes y a salir a flote las potencialidades que tiene nuestro territorio, como el turismo”.

Al respecto, Perry concluye que “los campesinos son los que realmente generan y facilitan que se den estas dinámicas económicas importantes en los distintos territorios. Un país de pequeños propietarios es un país que tiene mucha más estabilidad política, eso está también plenamente demostrado. Y eso le quitaría un factor enorme de conflicto a la sociedad colombiana”.

La Comisión para el Esclarecimiento de la Verdad, la Convivencia y la No Repetición está estudiando la entre las dinámicas económicas y el conflicto armado colombiano, lo primero es entender qué son los modos de producción, así lo explica Andrés Fuerte, investigador de la Comisión de la Verdad: “son la forma en que se organizan las actividades económicas en un país o en un territorio. Son cosas tan concretas y esenciales como en qué trabajan las personas, de qué derivan su ingreso, su sustento, cuál es la relación que tenemos con el entorno, la naturaleza, el ambiente y los recursos naturales; y allí media también mucho la participación del Estado, es decir qué actividades o qué sectores económicos son favorecidos o incentivados por el Estado mediante las políticas públicas o la asignación de recursos del presupuesto, entre otros”.

 

Publicado en CN

No hay una expresión más democrática que la del arte, no hay que pedirle permiso a nadie para cantar, para bailar, para hacer teatro, ni para hacer graffiti”, expresó Lucía González, comisionada que lidera la estrategia cultural y artística con la que la Comisión de la Verdad busca facilitar que los colombianos comprendamos lo que sucedió durante el conflicto armado.

“La música ofrece una resistencia contra el luto, contra la pena que se impone como una condena, contra la cadena de la tristeza con que la guerra quiere amarrar a todas las sociedades”, expresó ‘El Cachi’ Ortegón.

 “El arte tiene que tener un sentido social profundo, un sentido político profundo y realmente si uno ve las grandes obras de arte, lo son porque han sido testigos, testimonio, voz de su tiempo”, dijo Lucía González, comisionada de la Comisión de la Verdad en conversación en Voces de la Verdad desde Casanare, al reflexionar sobre las resistencias culturales ante la violencia del conflicto armado.

“Hay problemáticas rurales que se expresan a través del arte, piezas campesinas hermosas, muy valientes, también hay una expresión urbana, pero también una académica relacionada con la intelectualidad. El arte no necesariamente tiene que ser un arte comprometido políticamente sino que es un arte sensible, consciente”, expresó por su parte Luis Francisco Bustamante, artista de larga experiencia en manifestaciones de resistencia de la sociedad civil y las víctimas.

Carlos César ‘El Cachi’ Ortegón, investigador cultural de Casanare, expresó durante el programa Voces de la Verdad que ante el conflicto armado “hay que seguir construyendo, seguir haciendo, seguir creando, seguir cantando. La música es resistencia de muchas maneras; la memoria que contiene el canto también es un acto obvio de resistencia contra verdades impuestas, contra acallamientos, es la posibilidad de decir cosas. Y comunicar es una resistencia contra la censura”.

“Ha sido a través del arte que muchas comunidades han logrado levantar la voz, hacer resistencia, hacerse oír, levantaron la voz, dijeron aquí estamos y no solamente estamos para contar los dolores, sino también estamos para contar nuestra dignidad y nuestros sueños”, explicó González al referirse a que la resistencia del arte no sólo es por medio de la denuncia, sino de la alegría que generan las diversas manifestaciones.

“La música también tiene un componente de estímulo, un componente de alegría, por eso cantar ofrece también una resistencia contra el luto, contra la pena que se impone como una condena, contra la cadena de la tristeza con que la guerra quiere amarrar a todas las sociedades”, agregó Ortegón.

“Emerge de esa alma de los pueblos una voz que se hace canto, que se hace danza, que se hace trova, que se hace letanía, que se hace arrullo, que se hace alabao para poder nombrar la vida que llevan y los sueños que los alienta”, dijo Lucía González.

Si desea conocer más información sobre la estrategia cultural de la Comisión de la Verdad, con la cual se está investigando sobre cuáles son los asuntos de la cultura que nos han llevado a que este conflicto se ancle en Colombia y cómo transformarlo, lo invitamos a consultar:

Conozca la estrategia cultural de la Comisión de la Verdad.

Vea los encuentros ‘Nombrar lo innombrable’ con artistas de todo el país

Conversatorio ‘El arte como revolución’

Conversatorio: La cultura: un lugar para resistir

Publicado en CN

Además de los impactos en la salud física, hay serias afectaciones a la salud mental de las personas de la Fuerzas Pública que estuvieron en el conflicto armado. La Comisión busca comprender lo ocurrido a los miembros de la fuerza pública para transitar hacia un futuro con un país en el que se transformen las causas que generaron y alimentaron la violencia armada. 

El conflicto armado ha dejado fuertes impactos en la salud física y mental de un gran número de miembros de la fuerza pública. La Comisión para el Esclarecimiento de la Verdad, la Convivencia y la No Repetición ha escuchado a los miembros de la fuerza pública para comprender las consecuencias más profundas en sus vidas e incluir sus relatos en el informe final de la Comisión.

“La guerra no tiene vencedores ni perdedores, la guerra es algo absolutamente marcado por la inhumanidad y eso tiene consecuencias en la vida de las personas”, declara Dora Lancheros, coordinadora del enfoque psicosocial de la Comisión, quien también agrega que “hay muchísimo análisis que hay que poner en evidencia frente a la sociedad, en cuanto a qué ha pasado en las vidas, en la cotidianidad, en las emociones, en la forma de relacionarse en las personas de este sector que ha estado involucrado en el conflicto armado como representantes del Estado”.

El cabo Carlos Montes fue afectado por una mina antipersonal, en medio de sus tareas como militar; desde su punto de vista, Montes explica que para “las afectaciones son vitalicias, no nos volvemos a recuperar de eso por más de que la ciencia avance”. El coronel Javier Rodríguez detalla que las mayores afectaciones “han provenido de armas explosivas no convencionales, es decir del uso de minas antipersonales y artefactos explosivos improvisados, así mismo los miembros del Ejército han sido víctimas del secuestro, de tortura, de desaparición forzada, de violencia sexual y homicidios”.

Al respecto, Lancheros propone que la gente se pregunte “¿qué pasa, por ejemplo, con el estrés postraumático? Son experiencias que cualquier ser humano expuesto a este tipo de hechos hace que se cree un quiebre en su vida, un antes y un después, yo cómo era antes de y lo que pasó conmigo después, en cosas muy básicas, por ejemplo el sueño que se altera, el relacionamiento con las personas del núcleo familiar o las personas con las que comparte en el batallón, en las brigadas”.

Contar la verdad de lo ocurrido como parte del conflicto y las consecuencias en las vidas de los miembros de la fuerza pública permite comprender los verdaderos impactos de la violencia armada y tomar decisiones en favor de la protección de los miembros de la fuerza pública. “No es para juzgar o señalar lo que se puede haber hecho mal sino es para mirar hacia el futuro, qué acciones se deben tomar para que el pueblo colombiano tenga un ejército del que se sientan orgullosos”, explicaron militares extranjeros, de países que han participado en procesos de paz.

Si desea ampliar el tema, puede consular los canales digitales de la Comisión, en donde encontrará publicaciones relacionadas como las siguientes:

“Necesitamos decirnos verdades incómodas para salir adelante”: Alejandro Gaviria https://comisiondelaverdad.co/actualidad/noticias/alejandro-gaviria-necesitamos-decirnos-verdades-incomodas-para-salir-adelante

“La verdad en Colombia necesita el testimonio de todos”: Francisco de Roux https://comisiondelaverdad.co/actualidad/noticias/la-verdad-en-colombia-necesita-del-testimonio-de-todos-francisco-de-roux

Víctimas pertenecientes a la Fuerza Pública contaron sus historias a la Comisión de la Verdad https://comisiondelaverdad.co/actualidad/noticias/victimas-pertenecientes-a-la-fuerza-publica-contaron-sus-historias-a-la-comision-de-la-verdad

Huellas de la guerra: impactos del conflicto armado en víctimas exintegrantes de la fuerza pública https://www.youtube.com/watch?v=cylefOSXL4Q

 

Publicado en CN

Un abrazo fraternal fue el que se dieron víctimas y excombatientes durante un acto de reconciliación que tuvo lugar en el municipio de Villanueva. El significativo hecho se dio en el marco de unas de las actividades contempladas dentro de la iniciativa ‘Tendiendo Puentes’ que la ARN está liderando en estos dos municipios de Casanare.

“’Tendiendo Puentes’ es una estrategia cuyo objetivo es propiciar espacios de confianza, convivencia y participación comunitaria orientados a la reconstrucción del tejido social y la reconciliación entre la comunidad receptora de personas en proceso de reintegración y de reincorporación”, destacó la coordinadora del Grupo Territorial Casanare de la ARN, Paola Condía.

En esta iniciativa convergen víctimas, excombatientes, presidentes de juntas de acción comunal y comunidad en general. Cuenta con el apoyo de la Alcaldía de Villanueva, Alcaldía de Yopal, Defensoría del Pueblo, Personería Municipal de Villanueva, Servicio Nacional de Aprendizaje (Sena), Equión Energía, Escuela Superior de Administración Pública (Esap) y Policía Nacional. Con la estrategia se espera beneficiar a más de 500 personas.

‘Tendiendo Puentes’ se ha aplicado con total éxito durante el 2017 y 2018 en Yopal. En estos dos años se logró consolidar el Semillero de Danza Llanera y un Club Deportivo en la vereda San Rafael de Morichal. Además, la comunidad se vio beneficiada con recreación para niños, niñas y adolescentes y con cursos de formación dados por el Sena. 

“En el barrio Ciudad Berlín de Yopal, la iniciativa comunitaria dotó con implementos deportivos al Club Deportivo del sector, se realizaron tardes de recreación y de Cine Club, miembros de la comunidad recibieron formación dada por el Sena y con el apoyo de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), se efectuó mejoramiento al Salón Comunal”, acotó Paola Condía.

Fue así como en dos años, ´Tendiendo Puentes’ beneficio a más de 200 niños, niñas, adolescentes y comunidad en general de ambos sectores.

 

Publicado en CN

El programa Fe en Colombia en articulación con diferentes instituciones públicas y privadas, logra llegar y beneficiar a más familias de la región llanera, mediante líneas de acción que enfocan sus esfuerzos en el progreso y desarrollo del agro colombiano, empoderando líderes que trabajan por el bienestar de su comunidad.

100 árboles nativos forestales fueron sembrados de manera conjunta con la comunidad, los cuales no solo servirán como fuente de oxígeno sino también como barrera para las diferentes plantaciones que se encuentran en el lugar, como el cultivo del plátano. Previo a la jornada de siembra se realizó una mesa de trabajo donde se evaluaron las necesidades, evidenciando la falta de árboles que funcionan como barreras para la no pérdida de la producción a causa de los fuertes vientos que se presentan en el sector.

52 familias hacen parte de la asociación, quienes trabajan hoy en día en el cultivo de plátano, yuca y plantaciones aromáticas, obteniendo de este parte de su sustento y contribuyendo a la economía regional. Así mismo, le inculcan a los niños y niñas la importancia de la labor del campo, enseñándoles acerca del cultivo y como es su cuidado.

"Queremos darle las gracias a Fe en Colombia por apoyar nuestra naturaleza por apoyar al campesinos, por apoyar la fauna y la flora que eso es lo que nuestra Colombia necesita", indicó Carlos Jesús Peña Vásquez, presidente de la asociación De Regreso Al Campo.

Fe en Colombia, programa de todos para todos, seguirá desarrollando diferentes actividades y proyectos en beneficio del campo, llegando hasta las veredas más apartas de los departamentos de Arauca, Casanare, Vichada y Guainia, llevando soluciones a través de la oferta estatal y la articulación interinstitucional.

Publicado en CN

 

La Gobernación de Casanare y demás entidades que hacen parte del Sistema Nacional de Reparación Integral a las Víctimas- SNARIV preparan las actividades conmemorativas en ocación del Día Nacional de la Memoria y Solidaridad con las Víctimas del Conflicto Armado”, que se desarrollarán este martes 9 de abril, a partir de las 8:00 a.m., en las intalaciónes de la Asamblea Departamental.

Como parte de los actos comemorativos se contempla el pronunciamiento de la institucionalidad y representantes de la población actividades culturales en torno a este día, y actos culturales y conmemorativos en memoria de las víctimas, enviando un mensaje de reconciliación y esperanza.

Se destacan además algunas actividades recreativas, deportivas y culturales donde la población víctima participará de manera activa. Se trata de la 1ª Carrera Departamental por la Vida y la Paz”, y el Concurso de Música Llanera “Inspírate por la Paz y la Reconciliación”, a partir de las 2:00 p.m. en el complejo deportivo Los Hobos, en el municipio de Yopal.

Por su parte, la Gobernación de Casanare invita a toda la población víctima y ciudadanía en general a participar de estas actividades y unirse en torno al reconocimiento de la necesidad de la construcción de la paz y la reconciliación.

Las instituciones que hacen parte de esta iniciativa, además de la Gobernación de Casanare son: Unidad para las Víctimas, Defensoría del Pueblo, Prosperidad Social, Policía Nacional, y Ejército Nacional.

Publicado en CN

 

Apoyar el proceso de reintegración a la sociedad civil de las personas que se apartaron de las armas y decidieron comenzar a construir un futuro lleno de esperanza y emprendimiento junto a sus hijos y parejas, es el trabajo que ha liderado la Gobernación desde la Secretaría de Gobierno y su Dirección de Asuntos Municipales.

Durante los últimos tres años (2016, 2017 y 2018) se implementaron 500 acciones en beneficio de las personas que dejaron atrás la ilegalidad y decidieron construir nuevos sueños; se brindaron capacitaciones en asesoría jurídicas, financieras, productivas y empresariales;  otras doce personas se favorecieron con recursos en especie, lo que muy seguramente les ha permitido mejorar sus condiciones socioeconómicas y reactivarse en el mercado laboral.

Tal es el caso de la gerente de Cueros Natima, Nancy Tinjacá, quien agradece al gobernador Josué Alirio Barrera la confianza que le dio para fortalecer su micro empresa. Ella  necesitaba una máquina de poste para coser y pudo adquirirla gracias a los diferentes programas que maneja la Secretaría de Gobierno.

Desde esta Dirección, en el marco del proyecto “Apoyo a iniciativas de reconciliación”, se generan respaldos a esta población que les permita tener una rápida inclusión social, económica y comunitaria. Según Nancy, a través de un proyecto que presentó a la institución logró el apoyo para su empresa de la que ahora, con la fabricación de bolsos, billeteras y correas, obtiene el sustento para su familia.

Según datos de la Agencia para la Reincorporación y la Normalización (ARN), en Casanare hay 954 personas en procesos de reintegración, 68 reincorporados, lo cual indica que con los programas de la Gobernación se ha beneficiado al 48% de esta población.

El secretario de Gobierno Milton Álvarez señaló que durante 2019 se continuará trabajando en apoyar proyectos productivos empresariales y el acompañamiento jurídico en el marco de justicia transicional, fomentando la creación e implementación de los Consejos Territoriales de Paz, Reconciliación, Convivencia y No Estigmatización, en los municipios del departamento, en aras de fortalecer la cultura de paz, y lograr la transformación de conflictividades que permitan que estas personas se unan a la construcción de una mejor sociedad, cambiando la violencia por convivencia, respeto y paz.

Publicado en CN

 

  

  

    

 

      

 

 

 

 

Noticia en vídeo