Consternación en la sociedad yopaleña causó la sorpresiva partida a la eternidad del empresario Hugo Muñoz Arévalo, quien por muchos años estuvo vinculado con el sector de la gastronomía.
Muñoz Arévalo había llegado a la capital casanareña hacía más de treinta años y tomó el tradicional restaurante "Pueblito Viejo", ubicado inicialmente en el parque Ramón Nonato Pérez.
Allí junto a su esposa Sara Niño, consolidó durante muchos años un verdadero punto de encuentro de celebración de eventos especiales, debido a la calidez de la atención, la calidad del servicio y el exquisito sabor de las comidas que ofrecía.
Con el ánimo de dar un ambiente campestre "Pueblito Viejo" se reinauguró en la vía Matepantano y en ese lugar, Hugo, vivió y atendió su negocio hasta su último día.
Justamente en este allí se dio su deceso, cuyas circunstancias son materia de investigación por parte de las autoridades. Solo se conoce que un empleado del restaurante encontró el cuerpo sin vida del empresario, en la mañana de este 3 de julio.
Se conoció que al parecer días antes de su muerte, Muñoz Arévalo de 62 años de edad, había manifestado que tenía problemas personales y de salud. De todas formas, serán las autoridades las que determinen, luego de la respectiva investigación, los móviles de su fallecimiento.